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![]() ![]() GUÍA Nº1 TEMA V HISTORIA UNIVERSAL ÉPOCA CONTEMPORÁNEA
LA REVOLUCIÓN FRANCESA A finales del siglo XVIII y a lo largo del XIX, tuvieron lugar una serie de revoluciones políticas, sustentadas en los principios del liberalismo y del nacionalismo, provocando profundos cambios que configuraron al mundo contemporáneo. Las monarquías del Antiguo Régimen fueron remplazadas por gobiernos de carácter constitucional y parlamentario; la diversidad de entidades políticas se redujo con la construcción de los Estados nacionales, y los derechos ciudadanos constituyeron la base de la vida política. En este contexto, la Revolución Francesa fue, sin duda, una de las revoluciones de mayor trascendencia política, con alcances en otras regiones del mundo que duran hasta nuestros días. MULTICAUSALIDAD DE LA REVOLUCIÓN FRANCESA ¿Qué fenómenos hicieron posible la Revolución Francesa?, ¿cuál fue el impacto de esta Revolución en la Europa del siglo XVIII y que llega hasta nuestros días?. A continuación sus principales causas:
DESARROLLO DE LA REVOLUCIÓN En 1788 el Estado francés llegó a estar en franca bancarrota. El rey Luis XVI (1774-1792) decidió imponer una reforma para aumentar los impuestos, lo que provocó la crítica de la aristocracia, que se negaba a pagar esas nuevas contribuciones. Frente a la crisis, el Rey convocó a los Estados Generales, el 5 de Mayo de 1789, instancia en que los tres estamentos de la sociedad se reunían a discutir asuntos de interés común, iniciándose así, el proceso que dio origen a la Revolución.
ETAPAS DE LA REVOLUCIÓN:
La coronación de Napoleón como emperador, ¿echó por tierra los valores de la Revolución? Si bien fue un gobierno personalista que restringió las libertades públicas, la mano fuerte de Napoleón estuvo al servicio de las ideas y proyectos claramente heredados de la Revolución, como la abolición de privilegios y de la servidumbre, el establecimiento del sufragio universal masculino, o la libertad de culto y educación, los que imponía en las regiones conquistadas. El Imperio napoleónico no pudo combatir a las monarquías europeas y terminó con la derrota de Napoleón en la batalla de Waterloo, en 1815. CONSECUENCIAS DE LA REVOLUCIÓN FRANCESA Los principios e ideas propiciadas por los filósofos ilustrados cristalizaron en el desarrollo de la Revolución Francesa. Así, ideas como la separación de poderes del Estado, la soberanía popular, las libertades individuales y la igualdad, constituyeron referentes asumidos por los revolucionarios, quienes buscaron imprimir estas ideas como un sello de la nueva organización política. De ahí que el lema de la Revolución fue libertad, igualdad y fraternidad. La formulación de los derechos individuales quedó plasmada en 1789, en la célebre Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. ORIGEN DE LA POLÍTICA MODERNA Con la revolución Francesa se terminaron los privilegios y se dio paso al Estado Moderno, que se caracteriza porque todos los ciudadanos gozan por igual de los mismo derechos, de la misma forma que todas las unidades territoriales son equivalentes. Otro de los legados de la Revolución al mundo fue ni más ni menos que el desarrollo de la actividad política. Anteriormente, durante el absolutismo, las cosas se discutían poco, ya que todo giraba en torno a una sola entidad política: el Rey. Fue en la Francia revolucionaria que se constituyeron elementos tan claves para la política moderna como los partidos políticos, el eje izquierda-derecha, el rol público de la prensa y la actividad parlamentaria. DIFUSIÓN DE LOS PRINCIPIOS LIBERALES Y SURGIMIENTO DE IDEOLOGÍAS En Europa, pasado el vendaval napoleónico, en las primeras décadas del siglo XIX, vino un proceso de Restauración Monárquica: los monarcas depuestos por Napoleón en los países invadidos fueron repuestos en sus tronos. Entre 1814 y 1815 se realizó el Congreso de Viena, que reunió las principales potencias europeas para resolver los problemas de fronteras provocados por la expansión napoleónica. ¿Era una vuelta al absolutismo? En gran parte lo era, ya que las Constituciones promulgadas por los revolucionarios fueron anuladas y se retomó la idea del derecho divino de la autoridad. Sin embargo, había muchos europeos que no querían retornar al siglo XVIII. En 1820, 1830 y 1848 nuevas revoluciones sacudieron el mapa de Europa. La divulgación de los sentimientos nacionales, las fuertes desigualdades sociales producidas por el incipiente capitalismo industrial, fueron motivos para que estallaran movimientos que buscaban mayores libertades para la población. La mayor parte de los movimientos revolucionarios fueron sofocados rápidamente y no se mantuvieron por mucho tiempo. Sin embargo, estaba claro que el liberalismo era una fuerza poderosa y que ya había comenzado el fin del absolutismo en Europa. El liberalismo tendría que esperar; sin embargo, el nacionalismo se mostraba con mejor salud. Un par de décadas después de los fracasos de 1848, Alemania e Italia lograrían sus aspiraciones de unificación nacional. El vendaval desatado por la Revolución Francesa llegó hasta las regiones más apartadas del mundo, como Sudamérica. CAMBIOS EN EL ARTE, EL ROMANTICISMO A fines del siglo XVIII y comienzos del siglo XIX se plasmó el espíritu burgués, libertario de la Revolución Francesa. Se caracterizó por la rebeldía frente al modelo de belleza clásico; por la valoración de la naturaleza, y la supremacía de la imaginación y de los sentimientos por sobre la mentalidad racionalista. En la música destacaron Beethoven, Chopin y Schumann; en la literatura, Goethe y Víctor Hugo; en la pintura, Delacroix y Goya. |